Crece el mercado de los Wearables. Mientras que en 2015 se suministraron 80 millones de unidades, en 2016 se prevé vender un total de 111,1 millones de wearables, lo que supondrá un incremento del 44% de las unidades suministradas y un crecimiento medio del 28% hasta 2019, momento en que se lograrán comercializar 214,6 millones de unidades. Esta cifra es muy parecida a la ya pronosticada por Grand View Research en su análisis “Global Bring Your Own Device (BYOD) Market Analysis, Size And Segment Forecasts To 2020”, el cual prevé que el negocio del BYOD superará los $us 225.000 millones en 2020.
Los smartwach son demandados. Uno de los wearables más demandados es el smartwatch con una cifra de ventas 21,3 millones de unidades en 2015, y que alcanzará los 34,3 millones en 2016 y los 88,3 millones en 2019. Es decir, se espera que la comercialización de estos dispositivos tenga un crecimiento medio del 42,8% durante los próximos cinco años.
Ya hemos visto la rápida evolución de los relojes inteligentes en ordenadores personales. Por eso, cabe prever que el futuro smartwatch apenas se parecerá al que conocemos actualmente, los cuales dispondrán de conectividad móvil, sensores de salud y su valor se incrementará gracias a las aplicaciones de terceros. De hecho, según una noticia de Gartner, hacia el 2017 el 30% de los smart wearables serán completamente invisibles al ojo humano.
Ropa inteligente se abre espacio. A pesar de la alta demanda de los smartwatches, de acuerdo con Jitesh Ubrani, analista de dispositivos móviles en IDC, de aquí a 2019 los dispositivos más vendidos serán la ropa o las gafas inteligentes y los dispositivos para el oído. Dos ejemplos destacados son el Smart Suit presentado en la última edición del CES y las SmartGlass en la Wearable Expo 2016.
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