La seguridad de los ciclistas en las carreteras y entornos urbanos sigue suponiendo una asignatura pendiente para los responsables de la seguridad vial. La escasa visibilidad y la mala indicación en las intersecciones por parte del ciclista suelen ser los principales motivos de siniestralidad.
Es por ello que la start-up australiana, comandada por un ciclista de la talla de Mark Waldron, nos presenta unos guantes que incorporan la última tecnología de detección de movimiento para aspirar a erigirse en un referente mundial en visibilidad y seguridad ciclistas.
Desarrollados por y para los usuarios de bicicletas, los beSEENS, que es así como se llaman los guantes, incorporan siete pequeñas pero potentes luces ledes dispuestas en forma de punta de flecha sobre su parte dorsal que son visibles desde 30 metros por la noche y 100 metros por el día.
Los ledes se activan gracias a un sensor de movimiento incorporado, lo que evita que el ciclista tenga que desatender la conducción para accionar el dispositivo. La batería que los abastece de energía es de larga duración -hasta siete horas de uso continuo- y se recarga a través de una conexión USB. Los usuarios también podrán configurar el guante de manera que las luces permanezcan encendidas constantemente, para actuar así como una luz de marcha.
Los módulos que incorporan las luces ledes son totalmente extraíbles para, por un lado, su fácil recarga y, por otro, para el lavado de los guantes sin peligro de deteriorar sus componentes tecnológicos. Hablado de agua, hay que añadir que dichos módulos son 100 % resistentes al agua en caso de lluvia.
Estarán disponibles en dos estilos (urban y sport) y en varios colores y tallas. Actualmente, sus diseñadores están recaudando fondos a través de Kickstarter para hacer viable su producción en serie.
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